Puerto de Cassis

Las estrechas calles del centro histórico y sus coloridos y animados muelles invitan a pasear y a hacer descubrimientos gastronómicos.
Al abrigo del Quai des Moulin, la dársena está cerrada en sus lados norte y oeste por una colorida hilera de antiguas casas de pescadores, lo que la convierte en uno de los puertos más bonitos del Mediterráneo.
Allí se puede amarrar con cuerdas, al abrigo del "Mistral", el viento del noroeste que despeja rápidamente el cielo de sus nubes.
El puerto de Cassis es un patrimonio en torno al cual se ha organizado la vida de la ciudad a lo largo de su historia, un paisaje familiar que ha conservado toda su autenticidad.
La ciudad de Cassis está enclavada en el fondo de la bahía que limita al oeste con la punta de Cacau y al este con los acantilados de Soubeyranes y el cabo Canaille.
Desde su origen, toda la urbanización de la ciudad se ha realizado en torno a una pequeña cala, situada en la salida de un valle excavado en el relieve que domina la bahía.
Esta cala se convirtió en un puerto en la época romana y la vida social se desarrolló en ella a lo largo de los siglos hasta el punto de que el puerto se convirtió en el corazón mismo de la ciudad "Carsicis Portus". La ciudad convive con el puerto y el puerto es la imagen de la ciudad, un sitio único por el entorno y la animación que allí reina.